Me agradaba, casi, casi me gustaba, mas bien me gustaba. Tenia parte de esa sinceridad que venía buscando en una persona cercana ami. No solo me gustaba, me emocionaba, cuando ni siquiera hubiera surgido alguna atracción desde un principio.
Por supuesto que podria haberme dado cuenta antes y quiza evitar que la decepción fuera mayor, podria haber sido un poco escrupuloso y haber sacado el tema y sin embargo preferí creer en lo que decía y aceptar que tenía la razón. Pero como iba yo a saber que era mentira, cuando ni siquiera había una necesidad de que lo hiciera. Es parte de su naturaleza, me digo a veces cuando por las noches que no puedo dormir esta ese vació de la compañía a la que ya me había acostumbrado.
En el fondo no me dolió, pero ahhh como me decepcionó su situación, es verdad que suena muy bien el decir "No me gusta complicarme la vida" pero qué cruel se vuelve cuando al no complicarsela se la complica a los demás. No solo me la complicó sino tambien a la persona que mas dice amar en el mundo y a la que le jura amor eterno y a la que a mi me la negó como quien negar haber conocido a alguien.
Fue un momento de caos, un instante, un comentario en el que buscando sinceridad me acerque a una persona por la que sentía un respeto y decirle me gusta tu ex.¿Cual fue la sorpresa? obviamente no había ningún ex, no había una relación rota hacía tiempo, no había ese extrañamiento cordial por un ex por que sencillamente aun seguían teniendo algo. ¿Quien era yo, el intruso? ¿ Era el culpable de meterme entre dos personas y su relación cuando ni siquiera sabía que sucedía aún algo entre ellos? No. Hace años que preferí dejar de culparme y ser responsable nada mas de mis actos.
"Si eso te dijó a ti, me imagino a cuantos mas se lo habrá dicho" Me dijo. Hablamos y mas cosas salieron a relucir, situaciones que él desconocía y de las cuales yo sabía y evité mencionar pero era tarde.
Esa noche no pude ni dormir bien. Había tomado una desición y lidiaría con sus consecuencias, sin querer había abierto la caja de pandora con su supuesto "Ex" y el panorama ya pintaba demasiado negro para mi gusto. La cosa era asi, o avanzaba a lo que tuviera que avanzar pero no podía retroseder. Al mismo chico, el "ex" le dije: Acepto mi responsabilidad en esto, pero no aceptaré la de nadie mas, si quieres la verdad tal y como me la dijo te la doy, sin agregar ni quitar y el chico aceptó, todo cuanto quedó guardado, las platicas confidenciales, las charlas, los chistes, mi vida confiada a esa persona se la entregue para que la desición fuera tomada no por mi, si no por quien quisiera saberlo todo. Eso fue todo.
Cómo me dolió la decepción, casi como una herida en el corazón que se sintió casi igual, sobre todo al ver la realidad del mundo que me rodea. ¿Sinceridad? Eso era una mierda, y la persona a la que secretamente admiraba se derrumbó ante mi. Ahora me culpaba ami, de mentir, de querer separar, de jugar con los sentimientos y de envidiar.
Podria haber vivido con la idea de qué tipo de persona es, al final nunca me mintió sobre sus problemas de fidelidad, quiza podía vivir con la idea de que me hubiera negado a la persona que según ama. Pero el dolor de la decpción fue ver la cobardía y la inata calidad de su pensamiento. No pidió perdón a quien se lo debería haber pedido y solo culpó a alguien más para ser redimido. Ahi se fue el respeto, se fue la admiración, se fue el cariño que ya había en mi. Ahi valio verga y me demostró como nos podemos equivocar con las personas.
Ami me sacó de su vida. Yo estaba preparado para cualquier reclamo y aceptar mi parte, pero como lo dijo, no le gusta complicarse la vida. Nunca dió la cara, ni siquiera para que yo se la diera por lo que había hecho al hablar con su "Ex" Solo salió así como entró.
Ahora ellos piensan regresar y a mi me sorprendió el poco interes que surgió dentro de mi. Al "ex" le deseé lo mejor, si es lo que desea y perdonarle es ya cosa de ellos no mía, si ha de luchar por su sueño es su lucha no la mía, si han de ser felices, es su felicidad.
Al final aprendi de una forma dura y dificil, no esperaré a nadie más y le seré fiel a quien deba de serlo en su momento; seguiré siendo el hombre que soy y daré mi cara por mi errores cuando los cometa, pediré perdón cuando me equivoque y no culpare a otros de la mierda en la que yo me revuelque, por que lo aprendi muy bien.
Yo tambien quiero no complicarme la vida.
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